Miramos el mundo, el universo, desde nuestra perspectiva humana.
Y creemos que todo lo que existe está ahí, porque es lo que vemos.
Pero, ¿ es verdad ?.
Veamos un ejemplo. No colocamos de espaldas al sol, y entonces si miramos delante de nosotros veremos nuestra sombra:
¿ Existe el sol, o lo que existe es la sombra ?
Si nos damos la vuelta, ya no hay sombra, veremos el sol.
Pero démonos otra vez la vuelta, y examinemos lo que vemos.
Nuestra sombra.
Partimos de la idea de que el sol si existe, porque lo podemos ver, así que la sombra tiene que existir, porque también la podemos ver. ¿ O no es así ?.
Miremos esta espiral:
Está bien, … pero, ¿ es una espiral, o nos engaña nuestra vista ?.
Fijémonos bien, y son varios cículos que hacen el efecto de que hay una espiral. La vista y el cerebro nos engañan.
Con todo ésto, hemos de llegar a la conclusión de que nuestros sentidos no nos hacen percibir lo que existe, sino la parte que ellos permiten que percibamos.
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